Egoteca: Mi Petit Peugeot

El cuadro ideal es un guapo muchachito conduciendo un carro último modelo. Una gran proporción de féminas ha crecido gasolinera, es decir, su deseo sexual y gusto es directamente proporcional a la marca del carro de su novio. Su majestad Ruben Blades, tan citado en este blog diría -el era un muchacho plástico de los que por tema de conversación discute que marca de carro es mejor- digamos que el éxito también se mide por el carro que conduces, es más, se mide porque conduzcas y seas todo un ganador. Descubrí con mi experiencia de tener un padre y unos hermanos obsesionados con los autos, que una manera de emanciparme era aprendiendo a conducir, de tal manera que una mujer necesita adueñarse del volante, eso fue le que le faltó decir a Virgina Woolf en una Habitación Propia. De niña mi papá recién se había jubilado, así que su hobbie principal era armar y desarmar un campero ruso -como su nombre- que permanecía en el garaje de mi casa. Las anécdotas contaban como ...